Un kitroquito como Jorge Gómez se enfrento este pasado fin de semana a la ardua tarea de terminar una de las pruebas por excelencia del ultrafondo en el panorama nacional, Los 101 km de Ronda. Con estas líneas queremos darle la enhorabuena y decirle que no cese en su empeño de terminar esta prueba, porque aunque en su primer intento no lo haya conseguido, estamos seguros que para otro año lo podrá conseguir y disfrutar algo más que en esta edición. Mucho ánimo y en unos días a empezar a preparar el año que viene. Quien mejor que el para que nos cuente como le fue esta gran aventura:
"Fue una carrera bastante dura pero el tiempo acompaño, habia nubes y buena temperatura para correr pero creo recordar que solo hubo una recta, el resto para arriba o para abajo.
Empece bastante fuerte, pase por los 25kms donde hice la primera parada las 3h40' aprox a partir de ahi empezo lo duro con unas subidas infernales pero gracias a la musicota y al animo de la gente que corria o que estaba por el camino, te daba fuerzas para seguir. En el km 48 pete de la cabeza por que pensaba que llevaba 56kms que es donde era el puesto de descanso mas grande y donde te daban la ropa de abrigo y esos 8kms fueron una odisea. En el 56 llegue a setenil donde me tuvieron que dar masajes en las piernas para poder continuar y ahi se me echo la noche encima, llevaria unas 8h-9h corriendo/andando,
Y tuve que descansar bastante rato, porque la pierna derecha empezaba a decirme "vas a petar, vas a petar".
Gracias a las palabras de un amigo de antes de salir me dieron fuerzas para pasar los siguientes 21kms con animo y bastante sufrimiento llegando a las 12-1 am al cuartel de ronda con el animo bastante bajo y cojeando. Llevaria unas 12-13h de carrera.
"Cuando tus piernas no tiren, tirara tu cabeza y cuando tu cabeza no tire, tirara tu corazon".
"En la carrera no corres solo, yo estare corriendo a tu lado y todas las personas que te quieren y te apoyan".
En el 76-77km, el acuartelamiento de ronda me quede frio y con tiritona, me dieron masajes y anestesia en la pierna derecha, curaron heridas de los pies pero al km de seguir no tuve mas remedio que tirar la toalla, rabia y resignacion se apoderaban de mi pero no quedaba otra, estaba forzando demasiado y habia pocas expectativas de exito.
Me llevaron en bus hasta la meta y un legionario me cogio el pasaporte y fue a por camiseta y sudadera que solo se lo dan a los que terminan la carrera asi que me fui con un buen sabor de boca.
Carrera dura pero para saber lo que es el sufrimiento, hay que sufrir. Gracias a todos por el apoyo y el año que viene prometo acabarla."
Estamos seguros de ello mucho animo Jorge.
Un saludo.
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